Beautyblender (lo bueno, lo malo y lo regular)

Creo que después de varios meses de haber estado utilizando la famosa esponja BeautyBlender es momento de dar mi opinión. Siempre me llamó la atención pero como estaba acostumbrada a utilizar las brochas y los dedos para aplicar las bases de maquillaje y BB Creams, pensaba que probablemente iba a quedar olvidada en el fondo del cajón pero no ha sido así. Como podréis intuir gracias al título creo que no es perfecta, pero aún así he descubierto muchas cosas en ella que os quiero contar hoy.

La esponja que ha revolucionado la forma de aplicar el maquillaje tiene forma de huevo: en un extremo es redonda y en el otro termina en forma de punta, es decir, es anatómica y se puede adaptar a todas las formas de la cara. Está hecha de un material distinto a las esponjas a las que estamos acostumbradas (es muy suave).

Yo tenía muchas preguntas sobre ella antes de comprarla, pero definitivamente hasta que no la pruebas no sabes exactamente como funciona.

 

¿Cómo se usa la Beautyblender?

1. Se debe introducir en un bol con agua para que se impregne por completo. La debemos apretar para que el agua pueda penetrar por completo.
2. Luego debemos escurrirla por completo con la mano pero con delicadeza.
3. Posteriormente debemos retirar el exceso de humedad con una toalla.
4. Ponemos un poco de base en el torso de la mano e impregnamos la esponja en ella.
5. La aplicamos a toques por el rostro utilizando el extremo adecuado a cada zona.

¿La Beautyblender es apta para las pieles sensibles y reactivas?

Esa era una de mis principales preocupaciones, ya que mi piel es extremadamente sensible y algunos materiales (por ejemplo, brochas muy duras), pueden hacer que brote una pequeña dermatitis que tengo en las mejillas. Afortunadamente he descubierto que la esponja es ideal para quienes tenemos la piel así, y que incluso cuando la tenemos más reactiva, es mucho mejor aplicar la base con ella que con cualquier otra cosa (incluso las manos). En ese sentido debo decir que ha sido todo un descubrimiento para mi.

Mi experiencia con la Beautyblender

Creo que la esponja se merece toda la fama que tiene porque deja un acabado super natural, es decir, no tienes que ser una experta ni en bases ni en brochas para que la base te quede perfectamente aplicada. Creo que ese es justo el objetivo que buscó su creadora cuando la concibió y al respecto solo puedo decir que lo cumple con creces.

Si eres de las que prefieren ese tipo de acabado, lo consigues incluso con bases cremosas y/o muy cubrientes. Yo soy de ese grupo, así que gracias a ella le estoy dando uso a bases que tenía un poco aparcadas porque me resultaban demasiado pesadas. Otro punto a su favor.

La tercera cosa que me ha encantado es que es ideal para unificar el contorno de los ojos, ya que al pasar la esponja por la zona, la transición entre la base y el corrector de ojeras se difumina por completo y su aspecto luce completamente uniforme... tercer punto en mayúscula para la esponja.

¿Lo regular?

El aspecto que no me termina de convencer es que cuando lo utilizas con bases líquidas (tipo Maestro de Giorgio Armani, que tiene un acabado increíble), absorbe mucho producto con respecto a la brocha, así que con fondos de ese tipo prefiero evitarla. Cabe resaltar que con bases más cremosas eso no sucede.

¿Y lo malo?

Creo que la Beautyblender tiene dos cosas malas: Una que el material es muy delicado y tiene poros irregulares. Si te encuentras uno que sea demasiado grande, la posibilidad de que se rompa justo ahí es muy alta (muchas chicas me comentaron en Instagram que se les había roto al mes de haberla comprado y creo que ese es el motivo). Yo he sido al extremo cuidadosa y está en perfecto estado, pero hay que tener manos de porcelana con ella.

El otro aspecto que no me gusta es que se mancha y es imposible dejarla impoluta. La mía la lavo con un jabón natural siempre que la uso, pero he probado a hacerlo con el limpiador de la marca (gracias a una muestra), y sigue igual, así que debes acostumbrarla a verla así o si no optar por comprar la negra.

¿Entonces, merece la pena o no?

Para mi si porque adoro el acabado natural y es una gozada ver como las bases quedan tan perfectas y tan ligeras al aplicarlas con ella. Si por el contrario prefieres (o necesitas), que la base cubra mucho, el usar la Beautyblender le va a disminuir un poco su potencial.

Cabe anotar que, como siempre, esta es mi opinión y no la última palabra y puede que la experiencia de otra persona con la esponja sea distinta a la mía, pero si vuestras preferencias con respecto a acabado es parecida a la mía, deberíais probarla... yo la uso prácticamente todos los días.

Si os interesa podéis encontrarla en Druni o en Sephora, también en su precioso kit con el jabón).

¿Habéis probado la BeautyBlender?. ¿Qué opinión tenéis sobre ella?

¡Que tengáis una semana genial y gracias por leerme!

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