Ya todos tenemos claro que este verano va a ser de
todo menos normal, pero eso no puede ser disculpa para dejarnos llevar
por las circunstancias y abandonar nuestro cuerpo en las aguas del
confinamiento. Está claro que en este momento la prioridad es no
contagiarnos y mantener nuestra salud emocional lo más a flote posible,
pero si eres de los que se han dedicado a disfrutar de las bondades del
sofá durante estos últimos meses, es hora de aprovechar el 'subidón' de
la desescalada y empezar a cuidar nuestro cuerpo nuevamente (más aún
sabiendo que el buen tiempo ha llegado y que probablemente sí vamos a
poder disfrutar de él).
Empieza sin prisa, pero sin pausa
Lo primero que debes empezar a ejercitar antes de arrancar es tu cabeza: debes mantener fuerte la voluntad e interiorizar que es algo bueno que vas a hacer por ti mismo. A partir de ahí, empieza caminando y poco a poco ve aumentando la velocidad (no hace falta que llegues a correr, sobre todo si es un deporte que definitivamente no te gusta). Lo más importante es lograr que te muevas a diario, ahora que muchos ni siquiera tenemos que hacerlo para ir a la oficina, y que complementes esa actividad en el exterior con sesiones dentro de casa.
Aumenta un poco la intensidad cada día
Esto debes tomártelo como un reto personal, así que en cuanto logres convertir en rutina el hacer algo de ejercicio, es sano ir un paso más y aumentar la exigencia: que los trayectos sean cada vez más largos, que el paso sea más rápido y si te atreves, empieza a correr de forma suave. En las sesiones de casa puedes aumentar las repeticiones cada semana para que el trabajo se note rápidamente, aunque hay muchas otras opciones para hacerlo de una forma divertida.
Si no tienes tiempo, aprovecha los desplazamientos que hagas
Si tienes que ir al trabajo, puedes intentar evitar el trasporte público y hacerlo andando. Sé que en muchas ciudades no es fácil por las distancias, pero teniendo en cuenta las circunstancias, puede ser una muy buena idea. Yo lo he hecho durante largos períodos de tiempo y por experiencia propia os digo que en una semana más o menos os habréis acostumbrado. Solo necesitas levantarte a tiempo, unas zapatillas versátiles que te sirvan tanto para andar cómodamente como para combinar con cualquier prenda (no os lo creeríais pero mis favoritas son unas sneakers para hombre que compré en YOOX, una tienda online de moda), unos cascos y buena música.
Trabaja la musculatura en casa
Recuperar tu forma física requiere un esfuerzo adicional a 'salir a andar un poco': es imprescindible prestarle atención a tus músculos porque estos pierden tono en cuanto dejas de trabajarlos. No te asustes: no necesitas ni equipos especiales ni mucho conocimiento (aunque sí cuidado para no sufrir una lesión). Basta con dedicarle un poco de tiempo a cada grupo muscular (por ejemplo, un día puedes dedicarle media hora a brazos y espalda, otro día a piernas y glúteos y otro a abdominales), con ejercicios sencillos que se puedan hacer con tu propio peso. Esta lista de Vitónica me parece super útil porque reúne algunos de los más efectivos para bajar de peso.
Revisa tu dieta
Esto todos lo sabemos de sobra, pero nunca está de más recordarlo. Aprovecha esta época para diseñar los menús de la semana y así controlar lo que comes (es uno de mis trucos favoritos para comer de forma saludable), dale rienda suelta a tu creatividad en la cocina empezando por las ensaladas y permítete un capricho de vez en cuando y sin culpas.
Uno de los errores más frecuentes en los que podemos caer es en la cantidad de azúcar que tiene nuestra comida, y eso sucede con mayor frecuencia si consumimos platos precocinados (puedes darle un repaso a las etiquetas y te sorprenderá la lista de alimentos que contiene cantidades ingentes de él, como el tomate, los yogures y cualquier tipo de salsas envasadas). Lo ideal es hacerlo todo en casa con productos frescos. Sé que al principio puede costar, pero si le pones empeño, en cuestión de semanas ya lo habrás asumido como un hábito.
Contadme, ¿qué tal está vuestro estado físico después del confinamiento? ¿os habéis planteado empezar a ejercitaros?
¡Un abrazo y gracias por leerme!
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