El desorden -o el exceso de cosas- no nos deja pensar con claridad e influye muy negativamente en nuestro estado mental. Por eso, tan importante como un detox a nivel físico, es fundamental hacerlo en el entorno en el que vivimos.
Supongo que la gran mayoría de nosotros hemos realizado el tedioso ejercicio de hacer una mudanza alguna vez en la vida. Si no es el caso, hay dos cosas que lo hacen realmente memorable: una, te das cuenta de que tienes tantos objetos innecesarios en casa, que llega un momento que te agobias, y dos, tiras tantas cosas (incluídos muchos de ellos), que no llegas a entender como has tenerlos durante tanto tiempo.
Por eso, un muy buen ejercicio antes de empezar un nuevo año, es hacerlo en nuestro hogar. Como bien dice Marie Kondo, deshacernos de todas esas cosas es una forma de "detoxificar" el hogar.
1. Comienza por una habitación y no cambies hasta que no hayas terminado
Cuando entres a la habitación, observa como está y qué es lo que no te gusta de ella. Ten en cuenta tanto los muebles, como la decoración, la ropa e incluso la disposición de las cosas y manos a la obra. Saca las cortinas, alfombras y todo aquello que necesita una limpieza profunda.
2. Ten en cuenta el trastero y del garaje
Nunca he escuchado a nadie que no diga que tiene su trastero hasta arriba. Por eso todo este proceso debería trasladarse al trastero y al garaje. No guardes "por si acasos" ni cosas estropeadas que finalmente lo único que hacen es quitarte espacio.
También es recomendable hacerlo dentro del coche (si tienes niños sabes que ahí puedes encontrar desde juguetes hasta comida), e incluso podemos aplicarlo a los vehículos que tenemos. (en nuestro caso debemos vender una moto de segunda mano que está muerta de risa). Por si es vuestro caso, os recomiendo donde hicimos la valoración de motos usadas.
3. Saca todas las cosas que ya no utilices y clasifícalas
Un consejo: hazlo sin pena y sin pensar en que más adelante lo vas a necesitar (si no los ha mirado en los útlimos dos años, las posibilidades son mínimas). Dona aquello que está en buen estado y se le puede dar una seguna oportunidad y tira aquello que no. La paz mental que supone este ejercicio compensa todo el trabajo que vas a invertir haciéndolo.
4. Clasifica en cestos y cajas y organízalos de forma accesible
Tu vida cambia cuando ves lo que organizar las cosas en cajas -siempre con etiqueta- puede hacer por ti. Intenta que las cosas que más uses sean las más accesibles, que el contenido también esté organizado y evita caer en la tentación de guardar, nuevamente, cosas innecesarias.
5. Antes de tirar, intenta reutilizar cosas que ya tienes
Si tienes ropa a la que se le puede dar una vuelta, algún mueble que no te encaje por color u objetos decorativos que no termines de ver, intenta darles una segunda oportunidad, ya sea con un "lavado de cara" o cambiando las cosas de sitio... a veces ese sencillo gesto ofrece un "aire nuevo" al ambiente que te puede sorprender.
6. Pon más "verde" en tu vida
Las plantas purifican el ambiente (incluso de algunos metales pesados), brindan un aspecto más relajado a cualquier estancia y está comprobado que tienen un efecto terapéutico porque tenerlas a la vista, mejora nuestro ánimo. Sin duda, son las mejores aliadas para acer un "detox" constante a nuestra casa.
7. Piensa en tus siguientes decisiones pensando en la sostenibilidad
Después de esta limpieza a fondo, segúrate de deshacerte de las cosas de forma responsable y haciendo uso de los contenedores correspondientes y del punto limpio. Por último, antes de comprar nuevas cosas para tu armario o tu casa en general, piensa en que siempre, menos es más y que el planeta necesita que seamos más sostenibles.
Después de todo el proceso, te aseguro que sentirás una satisfacción indescriptible, muchas ganas de empezar nuevos proyectos y la energía renovada. ¿No os parece una gran forma de empezar el año nuevo?
¡Que tengáis un feliz día y gracias por leerme!
Me han encantado los consejos, la verdad es que vienen genial.
ResponderEliminarBesitos.